Un 1 de junio en un finca increíble La Marina, Santos y Natalia se dieron el «si quiero» delante de sus seres más queridos. Santos era pura emoción y no dejaba de mostrar su cara más dulce ante Natalia que sonreía con su particular estilo. Así fueron pasando las horas, hasta que La Mancha decidió pasar una hoja más en el calendario y la fiesta se sumergió en un jolgorio que solo los que estuvieron allí conocen.